Desde el Juzgado de Faltas se realizó una petición al Concejo Deliberante para que sancione una nueva ordenanza que ayude a controlar y a multar en caso de ruidos molestos en comercios y domicilios.
La petición surge porque, si bien actualmente hay una ordenanza sobre ruidos molestos, ésta aplica únicamente a boliches bailables o locales comerciales de esa índole y, para el resto de los comercios o situaciones en las que se produce contaminación sonora no hay reglamento ni parámetros establecidos.
En diálogo con FM 90.3, Elías Cesarego, desde el Juzgado de Faltas, comentó que se solicitó “una normativa que se pueda aplicar a todo tipo de comercios, que establezca, por ejemplo, respetar horarios de descanso, y que específicamente diga cuándo un ruido es molesto y que nos permita actuar ante esta falta“.
Uno de los parámetros a utilizar podría ser una escala de decibeles, en las que se delimite hasta cuándo un ruido es aceptable y a partir de qué decibel se considera desagradable.
Actualmente cuando se denuncian estas situaciones, como suele ser en talleres mecánicos, de herrería, en gimnasios o en casas particulares, se deriva el reclamo al área de Inspección y se “trata de conciliar, porque no está establecido cuándo un ruido es molesto”.
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