La dirigente de Victoria expresó que “la transformación del país depende de reformas profundas en el Estado, en materia laboral, en cuanto a políticas tributarias y en el sistema educativo”, pero advirtió que estas reformas “tienen que tener el espíritu del interior del país” y que es necesario “evitar que se les imponga una visión centralista”.
Consideró además que “hay que invertir la lógica actual y modificar un patrón que nos ha condenado a desarrollos minusválidos en el interior del país”.
“Las economías regionales tienen que ser el motor del desarrollo, ya que sólo de ese modo la economía crecerá de abajo hacia arriba”, dijo y sostuvo: “Muchos esperan que lleguen las inversiones, que los números empiecen a cerrar, que se reduzca el déficit y que luego se produzca el derrame porque de ese modo -dicen- se salva la Argentina, pero -advirtió- no sé si así se salvan los argentinos”.
“Mi temor es que este Gobierno haga foco en la macroeconomía y en las inversiones, pero que la calidad de vida de los argentinos retroceda. No quiero que eso suceda, por lo que pretendo que en el Congreso de la Nación haya voces entrerrianas que se hagan oír y orienten las reformas del Estado hacia un sentido social”, manifestó Jaroslavsky.
Para la precandidata es vital “estar atentos a las estrategias que intentará aplicar el Gobierno nacional a la hora de llevar adelante estas reformas, ya que de la impronta que se les imprima dependerá el tipo de desarrollo que va a tener el país”. En este sentido, remarcó: “Ahí tenemos que estar nosotros para tratar que se invierta la lógica y que la economía crezca de abajo hacia arriba, de la mano del fortalecimiento de las economías regionales”.
Finalmente, la exintendenta de Victoria resaltó que “el país se debe desarrollar desde el interior hacia el poder central” y aseveró que “hay que invertir la lógica actual y modificar un patrón que nos ha condenado a desarrollos minusválidos en el interior del país”.
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