“Pan para hoy, hambre para mañana”, diría alguno ante los trabajos que realizó esta semana el municipio en calle Junín. Algo impensado el año pasado cuando los trabajos de repavimentación apuntaban solo a obras de larga duración. Sin embargo en el 2017, el Intendente Domingo Maiocco dio un giro en su política y salió a trabajar también en la urgencia de la traza vial de la ciudad, algo que pedían los vecinos, y que no estaban tan de acuerdo los anteriores funcionarios. Es que la antigua arteria de salida de los colectivos estaba intransitable, fruto de insalvables problemas que hay en el subsuelo de la zona, y que han dejado a la Estación Terminal de Ómnibus es situación muy delicada. “Respondimos a la demanda de los vecinos como hicimos en calle Rawson, y en la zona de Arenales entre Alem y 25 de Mayo”, explicó el Intendente que reconoció que hay zonas de la ciudad a las que todavía no se le ha podido dar respuesta, mencionando al Barrio Abadía, y calle Rocamora.
En relación a zona de la Terminal, es notorio el deterioro que empieza a mostrar calle Alem, salida ahora obligatoria de los colectivos, por lo que se apuran los plazos para el traslado de la terminal. Maiocco, en diálogo con La Semana, contó que siguen en pie las conversaciones con un inversionista privado para la construcción de la nueva terminal, y el desarrollo de un centro comercial en el lugar.
El plan de pavimentación se encontró con un inconveniente durante este mes, por las dificultades que tiene uno de los proveedores de piedras de la zona de Concordia para trasladar el material, por el corte de rutas que genera la creciente. Por lo pronto, el Municipio ya analizar nuevos proveedores de la zona para no detener el ritmo de trabajos, ya que el resto de los insumos se encuentra garantizados, según comentó el Presidente Municipal.
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