Ya es habitual para los victorienses encontrarse con algunos de estos “monstruos de dos ruedas”; siendo evidente que para estos motoqueros, que dicho sea al pasar, muchos de ellos ya pasaron las cinco décadas, se dan el gusto de recorrer las rutas argentinas y cruzar el charco desde Rosario y llegar a los siempre placenteros relieves entrerrianos. Este fin de semana no fué la excepción y la gran “fauna” turística que nos visita, sumada al color que ellos brindan con el rugir de sus motos se convierten en un gran atractivo y en el sentir de los sueños de muchos, ya que esta exposición urbana de máquinas regala a las siete colinas un espectáculo vibrante y de fuerte presencia.
RESUMEN DEPORTIVO
