En esta época del año, se incrementa la elaboración y el consumo de alimentos que contienen principalmente carne de cerdo, por lo cual es fundamental conocer cuáles son los riesgos que se pueden originar si consumimos los mismos sin ningún tipo de rótulo reglamentario que indique su origen y procedencia.
Es importante que el consumidor sepa que es lo que adquiere y los riesgos que implica consumir carnes de cerdos y sus derivados, cuyo origen sea desconocido, especialmente cuando la carne proviene de faenas caseras, y no cuentan con las medidas indispensables de higiene e inspección sanitaria, pudiendo contener muchas enfermedades, entre las que se encuentra la Triquinosis.
La triquinosis es una enfermedad transmitida por la ingesta de carne de cerdo cruda o mal cocida, que se encuentre contaminada con el parásito Trichinella spiralis.
Las manifestaciones clínicas son muy variables y pueden cursar como una infección inadvertida o presentar síntomas que, por lo general, comienzan con fiebre, dolor muscular intenso, dolor de cabeza y dolor e hinchazón alrededor de los ojos. También pueden aparecer signos gastrointestinales como diarrea y vómitos. Algunos casos son de mayor gravedad, inclusive letales.
En el caso de los cerdos éstos contraen la enfermedad al ser alimentados en basurales, con desperdicios o restos de alimentos, dónde habitan roedores.
Medidas de prevención:
· Consumir siempre carne de cerdo y sus productos derivados (embutidos y salazones) faenados y/o elaborados por establecimientos autorizados para tal fin por la Autoridad Sanitaria competente.
· Adquirir solo productos que posean rótulo verificando el nombre del establecimiento elaborador y sus datos así como la habilitación de Autoridad Sanitaria competente, lo que implica que fueron controlados bromatológicamente. Evite comprar sin rótulo.
· Si consume carne fresca de cerdo, puma o jabalí, cocine completamente hasta que desaparezcan los jugos rosados (temperatura interna: 71ºC).
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