En el marco de esas reparaciones, el hombre extrajo el velocímetro de su auto, mientras estaba estacionado frente a 25 de Mayo 513, lo colocó sobre el techo del Fiat, para tenerlo a mano durante las reparaciones, ingresó un instante en su domicilio y cuando salió el velocímetro ya no estaba.
Primeramente -como pasa en estos casos- pensó que estaba confundido y que lo había colocado en otro lugar, buscó en el interior del auto, entre las herramientas, incluso dentro de su casa, creyendo que sin darse cuenta lo había llevado consigo… pero no, finalmente llegó a la conclusión de que alguien había aprovechado la oportunidad, y en esos segundos que no estuvo se lo llevó, por lo que radicó la denuncia en la jefatura local.
Se trata de un velocímetro LYP -según precisó la información policial- con carcaza cromada, fondo blanco, con una luz testigo adicional.
Horas más tarde, en el marco de las recorridas de rutina, funcionarios policiales encontraron la autoparte en Ángel Balbi entre Arenales y Paso, siendo secuestrado preventivamente.
Continúan las investigaciones tendientes a determinar lo ocurrido e identificar a los autores.
RESUMEN DEPORTIVO
