“Hoy los invito a que mirando nuestro pasado recomencemos e imaginemos nuestro futuro que sin dudas será diferente al que vivimos, pero no por ello será menos auspicioso”, aseveró el intendente Domingo Maiocco al momento de la lectura de su discurso.
Rememoró los inicios de la ciudad para más adelante dedicarse a los principios rectores que nos legaron los pioneros, y que hoy se respetan convirtiendo a la ciudad en una puerta al turismo, con mayor infraestructura, y adelantó la pronta puesta en funcionamiento de la Planta Asfáltica “lo que permitirá en un corto plazo recuperar las arterias afectadas que hoy son reclamadas por los vecinos con justa razón”.
Recordó las obras que se llevan a cabo en la ciudad: la Cuenca Ezpeleta, el Colector Perón y el asfalto para Festram (que comenzará en breve), con el acompañamiento de la Provincia y el Enohsa, pero también la terminal de ómnibus Ricardo Alfonsín, que está en su etapa final y se realizó con mano de obra municipal y recursos propios.
Anunció la aprobación por el Enohsa de la primera etapa para el recambio de cañerías de agua potable en el casco urbano, los más antiguos y de roturas habituales.

















El acto se cerró con el desfile de niños de los Jardines Maternales vestidos de época, y luego fuerzas de seguridad y escuelas.
Participaron el administrador del Enohsa, Enrique Cresto; el diputado nacional Rogelio Frigerio, la diputada Gracia Jaroslavsky; la viceintendente Ana Schuth; el rector de la Basílica de Aránzazu, Héctor Trachite; los secretarios Pedro Mansilla e Ibel Ibarra; la directora departamental de Educación, Claudia Pereyra; representantes de fuerzas de seguridad, concejales y público en general.




















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