“Yo siempre digo no es que vamos a quedar sin agua. Si es cierto que por esta bajante el agua es mucho más turbia y nos obliga a gastar más productos, y el mantenimiento de las bombas es otro y esto si es costoso. Y por otra parte también tenemos el problema de la cañería del suministro del agua que todos sabemos que es tan obsoleta como el sistema de cañerías”.
El intendente recordó que en la última visita de Cresto a la ciudad se acordó un proyecto en cuatro etapas que tendrá un valor aproximado de 8.200.000 dólares. Este proyecto se realizará de una forma muy parecida a lo que se está haciendo actualmente en el colector Perón, es decir, evitando las roturas de las veredas. En el caso de las cañerías de agua potable se colocaría una manga en aquellos caños que se puedan salvar”
En cuanto a uno de los temas que más preocupa a la ciudad, el agua que en algunos lugares sale con coloración blanquecina y burbujas, el intendente aclaró que de forma periódica se realizan análisis sobre la potabilidad del agua en distintos laboratorios. “Los otros días mandamos a –un laboratorio de- Rosario y se aseguró que la que la calidad del agua es normal”.
Además, aseguró que el personal de la planta potabilizadora son profesionales que realizan su tarea desde hace mucho tiempo con la responsabilidad que corresponde, que trabaja plenamente para garantizar la seguridad al consumir el agua.