Hoy, 28 de junio es el “Día internacional del Orgullo Gay” u orgullo LGBT+, desde el Área de la Mujer y de la Diversidad de la ciudad de Victoria, se realizó un comunicado para “Celebrar las Diversidades” y pidiendo “por una ciudad libre de discriminación, una provincia y un país donde los derechos sean de todxs y juntos”
Cabe destacar que la semana pasada se aprobó en el Congreso Nacional la ley del cupo laboral travesti-trans, conquistando, en el mes del orgullo, un nuevo logro para la comunidad LGBT y un paso más hacia la igualdad de condiciones en el ámbito laboral.
Al respecto hablaba Keily González, militante de los derechos LGBTI+, en una nota radial de AM980
Historia del día del orgullo
El arranque de esta tradición empezó en la ciudad que nunca duerme, Nueva York, en 1969, donde se produjeron los conocidos como los disturbios Stonewall, cuando la comunidad LGBTI de Estados Unidos se unió, por primera vez en la Historia, para reivindicar sus derechos.
Estas manifestaciones fueron en protesta de una redada policial que tuvo lugar en el pub Stonewall Inn, en Greenwich Village, durante la madrugada del 28 de junio. En los años 60 todavía no estaban reconocidos los derechos de este colectivo y había pocos locales los que sí les permitían la entrada abiertamente, aunque se enfrentaban a la posibilidad de ser arrestados.
Fue un año después, cuando tuvieron lugar las dos primeras marchas en favor de este colectivo LGBT, Nueva York y los Ángeles, a las que poco a poco, se comenzaron a sumar otras ciudades del país, y años más tarde, este movimiento se extendió a otros continentes.
Las personas LGBT aún sufren discriminación en muchos aspectos de sus vidas. La protección legal de la orientación sexual solo es notable en Europa, América y en los grandes países de Oceanía. Mientras tanto, la homosexualidad aún es ilegal en más de setenta países, sobre todo de África, Oriente Próximo y el sur de Asia. Gabón ha sido el último en despenalizarla, en 2020, pero todavía se castiga con la muerte en Mauritania, Arabia Saudí, Irán, Afganistán o Brunéi, donde desde 2019 las personas homosexuales pueden ser lapidadas hasta la muerte. En el caso de las personas trans, la Organización Mundial de la Salud no retiró la transexualidad de su lista de enfermedades mentales hasta 2018.