La semana anterior en el Salón de Usos Múltiples se realizó una capacitación en primeros auxilios básicos psicológicos a cargo de la psicóloga Stella Cístola.
La Semana, en diálogo con la profesional, señalando que “ esto tiene que ver en un marco de una situación de crisis, cuando la persona se siente desbordada, y que los recursos emocionales no son suficientes para poder afrontar la situación que está viviendo. Entonces son necesarios los auxilios psicológicos, así como hablamos de los primeros auxilios sanitarios, estos auxilios tienen que ver en brindar una protección y una seguridad y darle alivio en forma inmediata.
Stella Cistola sumó un ejemplo de este tipo de situaciones en un caso de gran actualidad: “Lo mal que se ha hecho o lo que no se ha hecho con respecto a la contención de los familiares de los 44 tripulantes del submarino ara San Juan, a través de la información, vemos que están reclamando no haber sido contenidos, no haberse trabajado con la verdad, la falta de información, no haber estado acompañado, eso es justamente lo que se brinda con un auxilio psicológico, dentro de lo que es una escena de una situación de emergencia, como podría ser también, lo que ocurrió hace un tiempo con los dos colectivos de la empresa Montica, cerca de Casilda, que colisionaron, con personas atrapadas, con gente que tenían adentro del colectivo a su seres querido, situación de descontrol, de reacciones abruptas, no siempre el personal de emergencia, pueden ocuparse de este tema, de estas escenas, es importante contar con voluntarios formados, preparados en estas técnicas, para sumarlo a un protocolo previo”.
Quien estuvo alguna vez en una emergencia, sabe que “ las reacciones iniciales de una persona, pueden complicar aun más el escenario de la gente, por eso es necesario que los primeros auxilios psicológicos sean tenidos en cuenta como los sanitarios, es lo primordial, ese es el motivo de estas capacitaciones, destinadas a personas comunes, porque a cualquiera le puede pasar e ir por la calle y encontrarse con este tipo de crisis de pánico en las emergencias”, dijo Cístola.
Las fases de los Primeros Auxilios Psicológicos
La aplicación de los primeros Auxilios Psicológicos ( PAP ) está dividida en ocho fases. A continuación veremos qué hacer y qué no hacer en cada una de ellas.
- Contacto y presentación
La presentación ante el afectado debe realizarse de una forma no intrusiva, explicando quiénes somos y qué hacemos. No debemos avasallar al afectado, nos mantenemos cerca pero sin ser intrusivos. En este momento la otra persona está en estado de alerta, así que no hay que dejar espacio a incertidumbre, ya que esta puede ser una fuente de miedos.
Un buen acercamiento es la clave para la correcta y efectiva aplicación de los PAP, ya que establece el tono que va a tener toda la relación que va a seguir a esta fase.
- Alivio y protección
Los afectados deben saber que estamos ahí para cubrir sus necesidades básicas, que estamos ahí para que no se preocupen por más cosas; desde promocionar agua y comida hasta un cargador del móvil o un teléfono con el que ayudar a la reagrupación familiar. De ese modo pueden ir relajándose poco a poco y dejar de temer por la incertidumbre del presente.
- Contención emocional
En muchas ocasiones los afectados por una emergencia se encuentran en estado de shock, desorientados y desubicados. Nuestra labor como psicólogos de emergencias será orientarlos en el espacio y en el tiempo de una manera no agresiva, adaptándonos a la realidad del paciente.
- Recogida de información
La forma en la que interactuamos con el afectado es muy importante, debemos hacerlo de manera en la que no se sienta incómodo, así podremos acceder a la mayor información posible para brindar la ayuda más eficaz.
Para ello debemos hablar de forma pausada, explorando todas las necesidades y clarificando la información, además debemosordenar las prioridades de atención y atenderlas en función de los recursos disponibles. No debemos dar consejos triviales al igual que tampoco trivializaremos las necesidades en función de nuestras opiniones.
- Asistencia práctica
Antes de nada deberemos anticipar informaciones prácticas útiles de las que quizás las víctimas no son conscientes aún,como dónde están los lavabos, los puntos de reagrupamiento, el avituallamiento… etc.
Ante las preguntas de los afectados con esta información conseguiremos rebajar su ansiedad y cumplimos con el objetivo de satisfacer sus necesidades básicas. Así, la ansiedad deja de acumularse, dado que ofrecemos atención en lo más fundamental.
- Conexión con la red social de apoyo
Es de suma importancia ayudar a los afectados a conectar de nuevo con su red de apoyo. Ya sea facilitándoles un teléfono con el que ponerse en contacto o, en el caso de que no lo tengan, contactando con las fuerzas de seguridad para requerir su ayuda en esa labor.
Hasta que no haya nadie acompañando a esa persona, preferiblemente de su red de apoyo, no nos marcharemos.
- Pautas de afrontamiento
La labor más importante será la de normalizar síntomas, muchos afectados creen que además de lo que les ha pasado se están volviendo “locos”, debemos alejar esa idea informando de las reacciones básicas de estrés esperables en las próximas horas y días.
Se les entrena en técnicas de relajación básicas, siendo la respiración diafragmática la técnica de elección, así conseguiremos reducir su nivel de actividad fisiológica y les daremos una herramienta de afrontamiento ante posibles futuros síntomas.
Por el contrario, no deberemos decir que ahora tiene que ser fuerte o valiente; lo único que hacemos con esa afirmación es no dejar al afectado experimentar sus propios recursos de afrontamiento..
- Conexión con servicios externos
A la hora del cierre de la intervención, como hemos hecho al inicio, deberemos explicar que nos marchamos y cuál va a ser el proceder a partir de ese momento.
No dejaremos solos a los afectados, nos marcharemos cuando llegue la red de apoyo social de la víctima o, en su defecto, nuestro relevo. Además deberemos dar pautas al afectado sobre cuándo y a quién pedir ayuda, conectándola con la red de salud pública.
Concluyendo
Como conclusión me gustaría resaltar la utilidad en el día a día de los PAP y la necesidad de su entrenamiento en toda la población, al fin y al cabo ¿no conocemos todos técnicas de primeros auxilios como la RCP o la maniobra de Heimlich?
Cuidemos no solo de lo físico, también de lo mental.