Si bien en un primer momento se buscó financiar a las distintas expresiones mediante un rifa que tuviera a los propios carroceros como vendedores, la propuesta fue rechazada en virtud de la experiencia que ya hay en ese sentido, y que dice claramente que las expresiones del carnaval carecen de la infraestructura y tiempo para la venta de rifas, lo que termina haciendo que finalmente se queden con rifas sin vender, y pierdan dinero, a menos que tengan la suerte de ganar el premio.
La otra opción que se consideró fue que las mismas expresiones se hicieran cargo de las entradas, algo que tampoco cerro, en la medida en que las distintas expresiones hacen noche a noche un serio esfuerzo para reunir a las personas necesarias para el trabajo (no sólo los que salen en ellas, sino los que trabajan en el acompañamiento y la logística) con lo que no podían garantizar un efectivo control.
En estas negociaciones ya se conocía que había un acuerdo previo entre Fullscreen y la comuna para que la empresa privada se concentre en la logística de la fiesta.
Finalmente, el acuerdo al que se habría arribado hoy, con base en este último punto, es que la comuna realizará aportes a las distintas expresiones desde octubre, y una entidad de bien público tendrá a su cargo la venta de las entradas, estimándose que sería Bomberos Voluntarios.