El allanamiento se realizó como consecuencia de una serie de averiguaciones que llevaron a determinar la ubicación de las herramientas que habían sido robadas a un hombre de apellido Muñoz, y mediante la orden del fiscal Taleb se pudo recuperar una amoladora y un taladro, ambos Black & Decker que habían sido adquiridos por el propietario de la vivienda allanada a muy bajo precio, supuestamente de buena fe.
Tras entregas las herramientas, el morador del domicilio allanado brindó precisiones sobre la persona a la que se lo había comprado, lo que permitió que sea identificada por la Policía por contar con antecedentes similares.