Cuatro años por cinco kilos de marihuana

Reynoso, de 39 años, fue detenido el 4 de julio de 2011, apenas pasada la medianoche, en un operativo llevado a cabo por efectivos de la departamental Victoria, tras ser sorprendido en actitud sospechosa, bajando de un remís apenas llegado de Villa Gobernador Gálvez, para darse a la fuga apenas notó la presencia policial, circunstancias en las que arrojó la mochila que cargaba y se echó a correr. No llegó lejos.
Al revisar el bolso encontraron seis ladrillos de marihuana, que hacían un total de poco más de cinco kilos.
El imputado fue condenado este miércoles en un fallo unánime, por el delito de transporte de estupefacientes, rechazando además la corte el pedido de nulidad del procedimiento policial
Durante la instrucción de la causa, el hombre había reconocido que la droga le pertenecía y que la había comprado en Rosario para comercializar en Victoria; pero ese testimonio no fue tenido en cuenta por el tribunal, ya que no fue ratificado en el debate oral. Sin embargo, en expediente constaban varios mensajes de texto que se intercambió con algunas personas a las que decía que les llevaría droga. Inclusive, los policías que participaron del operativo destacaron que Reynoso se bajó del remís a cuarenta cuadras de su domicilio, pero a pocos metros de donde vivía Darío “Topo” Solís, un hombre que un año antes había sido condenado por el mismo tribunal por tráfico de marihuana y con quien había intercambiado mensajes el día anterior.
En su alegato, el fiscal José Ignacio Candioti dejó explicitada su convicción de que la droga que Reynoso traía de Rosario sería entregada a Solís esa noche.
En su alegato, el fiscal había solicitado una pena de cinco años de prisión, en base a las pruebas y testimonios que había en el expediente y por considerar que “trasladar a Victoria una cantidad de cinco kilos de droga, con las que se podían obtener más de 26.000 dosis umbrales, constituye una circunstancia de gravedad extrema”.
Cabe recordar que en el procedimiento también fue detenido el conductor del remís, que luego fue desvinculado de la causa. En su declaración en el juicio, el chofer señaló que trasladó a Reynoso hasta Victoria, que el condenado se sentó a su lado, en el asiento delantero, que durante el trayecto notó que temblaba y nunca se apartó de la mochila que llevaba entre sus piernas. Sus dichos fueron refrendados por el encargado de la empresa de vehículos de alquiler, que lo atendió cuando contrató el viaje, unas horas antes del procedimiento en el que fue detenido.




RESUMEN DEPORTIVO

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here